Las Enfermedades de la Menopausia
La menopausia es un proceso biológico natural en la vida de la mujer que marca el fin de los ciclos menstruales y por ende el fin de la capacidad reproductiva. Suele producirse entre los 40 y los 55 años y es diagnosticada después de pasar doce meses sin tener un periodo menstrual.
Este proceso se va a manifestar con una serie de cambios fisiológicos y psicológicos, los cuales van a alterar la calidad de vida. La variedad de síntomas puede pasar por:
sofocos, sudores nocturnos, problemas de sueño, sequedad vaginal, disminución de energía, cambios en el estado de ánimo, aumento de peso, afinamiento del cabello, piel seca, entre otros. Por supuesto los síntomas pueden variar entre mujeres.
La menopausia en sí misma no es una enfermedad, pero los cambios hormonales que produce transcurrir esta etapa puede repercutir en la salud cardiovascular, metabólica y ósea.
Complicaciones
Existe la posibilidad de padecer algunas enfermedades y alteraciones después de la menopausia. Podemos mencionar algunas como:
Incontinencia urinaria: la falta de estrógeno provoca que se comience a perder elasticidad en los tejidos de la vagina y de la uretra. Es por eso que es posible que tenga la necesidad frecuente de orinar y tenga una pérdida involuntaria de orina. Se puede producir por levantarse o simplemente por reír o toser. Es posible también que sufra infecciones urinarias frecuentemente.
Aumento de peso: Durante la transición y después de la menopausia que vive la mujer es muy probable que aumente de peso, esto se debe al cambio que se produce en el metabolismo, que suele tornarse más lento.
Problemas musculo-esqueléticos: Las hormonas femeninas protegen al aparato musculoesquelético. Durante la menopausia estas hormonas disminuyen y es por eso que notará que empiezan a aparecer algunos dolores corporales.
Osteoporosis: Después de transitar por la menopausia es muy probable que pierda densidad ósea y esto aumenta el riesgo de osteoporosis. Esto provoca que los huesos se vuelvan más débiles y se vuelve más susceptible a fracturas de cadera, muñecas o columna vertebral.
Enfermedades cardíacas: el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares aumentan al disminuir los niveles de estrógeno producto de la menopausia.
Problemas circulatorios: otro problema que causa la disminución de estrógenos es que afecta a la calidad de circulación, principalmente en las piernas.
Función sexual: otro cambio que se puede priducir es la disminución en la producción de humedad vaginal lo que provoca sequedad, sumado a la perdida de elasticidad en los tejidos vaginales puede generar malestar durante las relaciones sexuales.También se reduce el deseo sexual.
Problemas en la piel: la disminución de colágeno influye en el estado de la piel provocando que tenga un aspecto de sequedad y deshidratación.
Repercusión psicológicas: los cambios hormonales interfieren en cambios de humor sin razón pasando entre la ira, tristeza y euforia. También provoca alteraciones psicológicas, pérdida de autoestima y memoria, ganas de llorar y depresión. Aparece una alteración en el sueño.
Consejos para reducir los riesgos de enfermedades en la menopausia
Algunos consejos que puede tener en cuenta para evitar estas enfermedades son:
- Controlar el peso para evitar de esta forma llegar a la obesidad
- Evitar todo tipo de alimentos con grasas saturadas y con azúcar.
- Aumentar el consumo de frutas, carnes magras, verduras, cereales integrales, pescados.
- Incorporar alimentos que estén enriquecidos con vitamina D y calcio.
- No olvidar beber como mínimo 2 litros de agua, esto ayudará a evitar las infecciones urinarias.
- Evitar consumir tabaco y alcohol
- Realizar ejercicios físicos de forma regular para aumentar la masa muscular.
- Consulte a su médico por terapias hormonales sustitutivas que pueden llegar a disminuir algunos síntomas de la menopausia.
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